Coleccion Mis superpoderes emocionales

Colección:

Mis superpoderes emocionales

Soy más fuerte que la rabia
Soy más fuerte que la rabia
Soy más fuerte que el miedo
Soy más fuerte que el miedo
Soy más fuerte que la tristeza
Soy más fuerte que la tristeza
Soy más fuerte que la vergüenza
Soy más fuerte que la vergüenza
Soy más fuerte que los celos
Soy más fuerte que los celos
Soy más fuerte que mi frustración
Soy más fuerte que mi frustración
Soy más fuerte que mis nervios
Soy más fuerte que mis nervios
Soy más fuerte que mi enfado
Soy más fuerte que mi enfado
Soy más fuerte que mis errores
Soy más fuerte que mis errores
Soy más fuerte que mis berrinches
Soy más fuerte que mis berrinches

Cuentos para trabajar las emociones: la colección ideal para niños y niñas

Los cuentos para trabajar las emociones se han convertido en una herramienta esencial para acompañar el desarrollo emocional de niños y niñas desde edades tempranas. En esta colección, hemos reunido diez historias pensadas específicamente para abordar una emoción por cuento, con lenguaje sencillo, ilustraciones cercanas y situaciones con las que cualquier pequeño puede sentirse identificado.

La infancia está llena de emociones intensas: rabia, miedo, tristeza, frustración, nervios... A través de estos cuentos sobre emociones, no solo damos nombre a lo que sienten los más pequeños, sino que les ofrecemos una forma segura, tierna y comprensible de empezar a gestionar lo que viven por dentro.

Esta colección no es solo un conjunto de relatos. Es una propuesta para madres, padres, docentes y profesionales que buscan educar emocionalmente a través de cuentos. Cada título está diseñado para abrir conversaciones, fomentar la empatía y construir puentes entre lo que sienten los niños y el acompañamiento adulto.

Sabemos que cada emoción necesita su espacio, su tiempo y su historia. Por eso, cada cuento se centra en una situación concreta, desde los berrinches inesperados hasta los miedos nocturnos, desde la frustración al intentar algo nuevo hasta la dificultad de aceptar los celos.

Si estás buscando cuentos para trabajar las emociones en casa o en el aula, esta colección te ofrece una guía emocional completa. Son relatos que acompañan sin juzgar, que permiten a cada niño y niña sentirse comprendido, y que invitan a transformar lo que sienten en fuerza interior.

Aquí comienza tu recorrido por una colección pensada con amor, empatía y propósito. Porque sentir también es crecer, y cada cuento es una oportunidad para construir un vínculo emocional más profundo con los más pequeños.

¿Qué es la colección “Mis superpoderes emocionales”?

“Mis superpoderes emocionales” es una colección de cuentos infantiles sobre emociones pensada para ayudar a los más pequeños a identificar, expresar y transformar lo que sienten. Cada libro está centrado en una emoción concreta y presenta una historia sencilla, cercana y emocionalmente significativa para niños y niñas de entre 3 y 6 años.

Esta colección nace del deseo de acompañar el mundo interior de la infancia desde la empatía, sin castigos, sin etiquetas, sin “no pasa nada”. Porque sí pasa: la rabia abruma, el miedo paraliza, la tristeza duele… y poner palabras a todo eso es el primer paso para crecer.

En total, la colección incluye diez cuentos sobre emociones infantiles, todos protagonizados por Liam, un niño que va descubriendo que sentir no es malo, sino un superpoder. Cada historia está diseñada para abrir conversaciones profundas entre adultos y peques, desde el respeto y el amor.

Los cuentos emocionales para niños incluidos en esta serie están ilustrados con estilo cinematográfico, con escenarios cotidianos y personajes expresivos que ayudan a conectar con la historia. Además, cada libro incluye una nota final con un mensaje directo del protagonista, y una guía práctica para madres, padres o educadores.

“Mis superpoderes emocionales” es más que una colección: es una invitación a acompañar las emociones con presencia, a crear espacios de calma y a recordar que detrás de cada berrinche o lágrima, hay un corazón que necesita ser comprendido.

¿Para qué edades están recomendados estos cuentos?

Esta colección de cuentos para trabajar las emociones ha sido diseñada especialmente para niños y niñas de entre 3 y 6 años, una etapa clave en el desarrollo emocional y la adquisición del lenguaje afectivo. Sin embargo, muchos de los libros también resultan útiles para niños de hasta 8 años, especialmente cuando las emociones aún se viven con mucha intensidad.

En esta franja de edad, los peques están comenzando a reconocer sus emociones, pero todavía no saben gestionarlas por sí mismos. Los cuentos les ofrecen un espejo donde verse reflejados y una guía suave para aprender a identificar lo que sienten: rabia, miedo, tristeza, frustración, vergüenza o celos, entre otras.

Si estás buscando libros para niños de 3 a 6 años que no solo entretengan, sino que también acompañen procesos emocionales reales, esta colección puede convertirse en una gran aliada en casa, en el aula o en consulta.

Además, los cuentos están escritos con frases breves, estructura clara y un lenguaje emocional accesible para el mundo infantil. Las ilustraciones hiperrealistas en estilo Pixar refuerzan la comprensión emocional incluso para quienes aún no leen por sí solos.

Ya sea para un momento de lectura compartida al final del día, para abordar una emoción concreta que ha aparecido, o para trabajar de forma continua la educación emocional, esta colección está pensada para acompañar a los más pequeños en su viaje interior, con respeto, dulzura y profundidad.

¿Por qué usar cuentos para trabajar emociones en niños?

Los cuentos para trabajar las emociones no son solo una forma bonita de contar historias: son una herramienta poderosa de conexión, aprendizaje y acompañamiento emocional. En la infancia, las emociones se viven con gran intensidad, pero los niños y niñas aún no cuentan con los recursos internos necesarios para entenderlas o gestionarlas. Ahí es donde entra en juego el poder de los cuentos.

A través de personajes con los que pueden identificarse, situaciones cotidianas y un lenguaje cercano, los cuentos de educación emocional ayudan a poner palabras a lo que sienten, a normalizar emociones difíciles y a comprender que todo lo que les pasa por dentro tiene sentido, aunque a veces duela o confunda.

Usar cuentos para gestionar emociones permite abrir conversaciones desde la calma, sin sermones ni castigos. Leer juntos un cuento sobre la rabia, por ejemplo, puede ser mucho más efectivo que cualquier explicación racional cuando un niño ha tenido un berrinche. La historia actúa como espejo emocional y como puente entre el niño y el adulto.

Además, los cuentos fomentan la inteligencia emocional en la infancia: desarrollan la empatía, mejoran la comunicación, fortalecen el vínculo afectivo y sientan las bases para una autoestima sana. Todo esto se logra desde la magia de la narrativa, sin necesidad de lecciones rígidas ni lenguaje adulto.

En esta colección, cada cuento está diseñado para abordar una emoción concreta con respeto, sensibilidad y un enfoque positivo. Porque trabajar las emociones no significa reprimirlas, sino comprenderlas. Y no hay mejor forma de hacerlo que con una historia que abrace por dentro.

¿Cómo están estructurados los libros de la colección?

Cada uno de los cuentos de la colección “Mis superpoderes emocionales” sigue una estructura narrativa sencilla y adaptada a la infancia, pensada para acompañar emocionalmente sin saturar ni sobreexplicar. La claridad, la coherencia visual y la conexión emocional están presentes en cada página.

Los libros comienzan con una breve introducción, seguida de una historia ilustrada de entre 24 y 28 páginas, que presenta una emoción concreta a través de una experiencia realista vivida por el protagonista. Las escenas están cuidadosamente seleccionadas para que los lectores pequeños puedan reconocerse, comprender lo que sienten y encontrar una posible salida emocional desde la conexión, no desde el juicio.

Al final de cada cuento, incluimos una doble sección especial:

  • Una nota de Liam, el personaje principal, que se dirige directamente al niño lector en un lenguaje tierno y cercano, reforzando el mensaje emocional del cuento.
  • Una mini guía para familias y educadores, con claves breves para acompañar esa emoción en casa o en el aula.

Además, todos los cuentos son libros ilustrados para niños con un estilo ultra realista, tipo Pixar, que ayuda a visualizar los gestos, emociones y ambientes de forma clara. Esto permite que incluso los niños que aún no saben leer puedan seguir la historia visualmente y conectar con el mundo emocional del personaje.

Esta estructura fija —cuento emocional, mensaje del protagonista, y guía final— convierte cada título en una herramienta emocional práctica que puedes usar una y otra vez. No son libros que se leen solo una vez: son compañeros emocionales que crecen con el niño.

Cuento sobre la rabia: Soy más fuerte que la rabia

La rabia es una de las emociones más intensas y difíciles de gestionar en la infancia. En este cuento para trabajar la rabia en niños, acompañamos a Liam en un momento en el que se siente fuera de control: algo no sale como él esperaba, y la explosión emocional aparece. ¿Qué hacer cuando todo arde por dentro y parece imposible calmarse?

Soy más fuerte que la rabia es un cuento ilustrado que muestra, paso a paso, cómo se puede reconocer la rabia, entender qué la provoca y aprender a salir de ella sin lastimarse ni lastimar a los demás. Con un lenguaje claro, expresiones faciales realistas y una narrativa cercana, este cuento se convierte en un verdadero recurso para acompañar las rabietas infantiles.

A lo largo del cuento, Liam descubre que no es malo sentir rabia: lo importante es qué hace con ella. Gracias al acompañamiento respetuoso de un adulto, aprende que parar, respirar y hablar puede ser el inicio de un superpoder interior.

Este cuento sobre la rabia está recomendado para niños de 3 a 6 años y también puede ser útil en entornos educativos para iniciar conversaciones sobre el autocontrol, la empatía y el respeto. La historia conecta especialmente con niños que se frustran con facilidad, se enfadan con otros o tienen dificultades para regular sus reacciones.

Si tu hijo o hija está atravesando momentos de tensión, explosiones emocionales o dificultades para calmarse, Soy más fuerte que la rabia puede ser un gran aliado. Es un cuento que no juzga, que abraza, y que recuerda que la rabia también se puede transformar en fuerza emocional.

Cuento sobre el miedo: Soy más fuerte que el miedo

El miedo infantil es una emoción universal. Todos los niños, en algún momento, tienen miedo a la oscuridad, a quedarse solos, a los monstruos imaginarios o simplemente a dormir sin compañía. Este cuento sobre el miedo infantil aborda uno de los temores más comunes: el miedo a dormir solo.

En Soy más fuerte que el miedo, acompañamos a Liam en una noche difícil. La habitación está oscura, los sonidos se sienten más fuertes de lo normal y el corazón late más deprisa. Con ayuda de su papá, Liam descubrirá que el miedo no desaparece de golpe, pero que hay herramientas para enfrentarlo: respirar, hablar, imaginar luz, abrazar su peluche... y confiar.

Este cuento para niños con miedo es una historia cálida, sensible y realista que invita a normalizar el miedo, no a reprimirlo. A través de ilustraciones tiernas y expresivas, los peques se sienten acompañados y validados en lo que sienten, mientras descubren que también pueden ser valientes.

Es ideal para leer juntos antes de dormir, sobre todo si tu hijo o hija tiene dificultades para separarse, apagar la luz o quedarse en su habitación. A diferencia de los cuentos donde los adultos minimizan el miedo (“no pasa nada”), aquí se acompaña desde la presencia, el vínculo y la confianza emocional.

Soy más fuerte que el miedo es más que un cuento para dormir: es un refugio emocional, una invitación a descubrir que el miedo no es un enemigo, sino una emoción que también se puede transformar con amor.

Cuento sobre la tristeza: Soy más fuerte que la tristeza

La tristeza en la infancia suele pasar desapercibida. A diferencia de la rabia o el miedo, que se manifiestan con fuerza, la tristeza a veces se esconde en silencios, miradas bajas o una falta de ganas. Este cuento sobre la tristeza infantil está pensado para ponerle palabras a esos momentos en los que un niño o una niña se siente apagado por dentro y no sabe por qué.

En Soy más fuerte que la tristeza, Liam experimenta una emoción que le cuesta entender. Echa de menos a alguien, no tiene ganas de jugar y siente un nudo en el pecho que no sabe explicar. A través de la presencia amorosa de su abuelo, va comprendiendo que la tristeza también tiene un lugar, que no hay que esconderla, y que a veces llorar es el primer paso para sentirse mejor.

Este cuento para niños tristes no ofrece soluciones mágicas, sino acompañamiento. Muestra con dulzura que la tristeza no es debilidad, sino sensibilidad. Y que expresar lo que uno siente puede transformar la emoción y aliviar el corazón.

Es ideal para niños que han vivido una pérdida, una separación o simplemente están más apagados de lo habitual. También es una excelente herramienta para trabajar el vínculo intergeneracional, ya que el abuelo de Liam es quien lo acompaña emocionalmente con calma y ternura.

Soy más fuerte que la tristeza es un cuento que abraza, que da permiso para sentir y que recuerda que incluso los días grises forman parte del camino de crecer. Porque cuando la tristeza se nombra, se escucha... y se transforma.

Cuento sobre la vergüenza: Soy más fuerte que la vergüenza

La vergüenza infantil es una emoción silenciosa, pero poderosa. Puede aparecer cuando un niño se equivoca, cuando otros se ríen, o simplemente cuando siente que no es suficiente. Este cuento sobre la vergüenza nace para acompañar esos momentos de inseguridad que muchas veces no se expresan en voz alta, pero duelen por dentro.

En Soy más fuerte que la vergüenza, Liam se enfrenta a un momento incómodo en la escuela: comete un error delante de la clase y siente que todos lo miran. La cara se le pone roja, las palabras desaparecen y lo único que quiere es desaparecer. Gracias al apoyo de su mamá y de un compañero que también se equivoca, Liam aprenderá que todos cometemos errores y que sentirse avergonzado es parte de aprender.

Este cuento para niños tímidos o inseguros es ideal para trabajar la autoestima, el error como parte del crecimiento, y la aceptación de uno mismo. La historia refleja con mucha sensibilidad cómo se vive la vergüenza desde dentro, y cómo el acompañamiento respetuoso puede ayudar a que no se convierta en una carga duradera.

Las ilustraciones muestran los gestos, el rubor, la mirada esquiva y la transformación emocional de Liam, reforzando la identificación del lector con la emoción. También abre un espacio para hablar sobre la risa hacia otros, la empatía y el respeto en el aula.

Soy más fuerte que la vergüenza es una historia que devuelve la mirada amorosa al niño que se siente mal por haber fallado, y le recuerda que ser vulnerable también es ser valiente.

Cuento sobre los celos: Soy más fuerte que los celos

Los celos infantiles son una emoción frecuente, especialmente cuando los niños sienten que compiten por el amor o la atención de alguien importante. Ya sea por la llegada de un hermano, una amistad nueva o una situación de comparación, los celos pueden generar mucho malestar. Este cuento sobre los celos ayuda a los más pequeños a entender lo que les ocurre por dentro y a transformar esa emoción en algo más sano.

En Soy más fuerte que los celos, Liam se enfrenta a una situación difícil cuando cree que un amigo prefiere jugar con otro niño. De pronto, todo cambia dentro de él: se enfada, se siente triste, y no sabe cómo actuar. Con ayuda de su mamá y una conversación sincera, descubre que sentirse celoso no lo convierte en alguien malo, sino en alguien que necesita sentirse seguro y querido.

Este cuento para niños con celos está pensado para ayudar a verbalizar una emoción que muchas veces se expresa con conductas agresivas, retraimiento o enfados injustificados. El cuento pone el foco en la empatía, la autoaceptación y la necesidad de conexión emocional.

Es especialmente útil en familias con varios hijos, en procesos de adaptación escolar, o cuando los niños experimentan situaciones nuevas que despiertan inseguridades. Puede ser un gran recurso para prevenir conflictos entre hermanos y trabajar la educación emocional en casa.

Soy más fuerte que los celos no busca eliminar la emoción, sino normalizarla, comprenderla y convertirla en una oportunidad para crecer. Porque cuando un niño se siente visto y amado, ya no necesita competir por ese amor.

Cuento sobre la frustración: Soy más fuerte que mi frustración

La frustración infantil aparece cuando algo no sale como los niños esperaban: no consiguen cerrar una cremallera, no logran dibujar lo que imaginaban o no pueden montar una pieza como querían. Es una emoción intensa que puede acabar en llanto, rabietas o abandono. Este cuento sobre la frustración está pensado para enseñar a los niños a parar, respirar y seguir intentando, sin perder la confianza.

En Soy más fuerte que mi frustración, Liam intenta montar un puzzle complicado. Al principio se entusiasma, pero cuando las piezas no encajan, la frustración crece rápidamente. Con ayuda de su mamá, descubre que está bien sentirse así, que equivocarse no es fallar, y que puede aprender a calmarse antes de rendirse.

Este cuento para niños que se frustran con facilidad es ideal para trabajar la paciencia, la tolerancia al error y la perseverancia. Ayuda a construir una base emocional que les permita seguir intentándolo incluso cuando algo parece difícil.

También es útil en contextos escolares o terapéuticos, especialmente con niños muy exigentes consigo mismos, o con baja tolerancia al fracaso. Las ilustraciones reflejan con sensibilidad el paso de la frustración al aprendizaje.

Soy más fuerte que mi frustración es una historia que recuerda que no todo sale bien a la primera, y que lo importante no es no equivocarse, sino aprender a seguir adelante con confianza y cariño.

Cuento sobre los nervios: Soy más fuerte que mis nervios

Sentir nervios en la infancia es algo natural, sobre todo ante los desafíos nuevos. A veces los nervios vienen con cosquillas en la barriga, un nudo en la garganta o ganas de salir corriendo. Este cuento para niños con nervios acompaña una de esas situaciones clave: aprender a montar en bicicleta sin ruedines.

En Soy más fuerte que mis nervios, Liam está a punto de subirse a su bicicleta sin ayuda por primera vez. Aunque quiere lograrlo, siente miedo de caerse, de no poder, de que su papá lo mire y falle. Los nervios se apoderan de él... y, efectivamente, se cae. Tropieza con una piedra y termina en el suelo. Pero algo cambia cuando su papá lo abraza, lo escucha y lo anima a volver a intentarlo.

Este cuento sobre aprender a montar en bici es una metáfora preciosa sobre los pequeños retos que para los niños son enormes. Habla de confiar en uno mismo, de intentar aunque tiemble el cuerpo, y de lo importante que es tener a alguien cerca que diga “tú puedes” sin presionar.

Es ideal para niños que se enfrentan a nuevos aprendizajes, como nadar, patinar, dormir fuera de casa o enfrentarse a situaciones que les generan inseguridad. También es muy útil para padres y madres que quieren acompañar los miedos y nervios sin sobreproteger, desde la confianza y la presencia activa.

Soy más fuerte que mis nervios muestra que los nervios no son un obstáculo, sino una señal de que estamos saliendo de nuestra zona cómoda. Y que con amor, paciencia y apoyo... también se aprende a pedalear con el corazón más tranquilo.

Cuento sobre el enfado: Soy más fuerte que el enfado

El enfado infantil suele aparecer cuando las cosas no salen como los niños desean. Puede explotar como un volcán y hacer que griten, lloren o se sientan fuera de control. Este cuento sobre el enfado refleja con mucha ternura ese tipo de momentos cotidianos en los que una emoción intensa necesita ser reconocida, expresada y sostenida con amor.

En Soy más fuerte que el enfado, Liam se enfada mucho porque quería ir al parque, pero está lloviendo. No puede entender por qué algo tan simple se ha arruinado, y siente que todo está mal. Las lágrimas salen solas, y su cuerpo parece arder. En lugar de reprimirlo, su mamá se sienta a su lado y le propone una idea especial: dibujar juntos lo que siente. Liam dibuja un volcán... el suyo.

Este cuento para niños con enfados por frustración no habla de castigos ni de control, sino de acompañar. La historia muestra cómo validar la emoción, ofrecer una vía de expresión simbólica (como el dibujo) y estar presente con calma puede transformar por completo el momento.

Es ideal para leer cuando los niños experimentan rabietas, se sienten frustrados por límites o cambios de planes, o cuando buscan formas nuevas de canalizar su enojo. También es muy útil para trabajar el vínculo emocional entre madre e hijo en momentos difíciles.

Soy más fuerte que el enfado es un cuento que no pretende apagar la emoción, sino iluminarla desde dentro. Porque a veces, cuando un niño no puede ir al parque, lo que más necesita no es un “no te enfades”… sino una mamá que le ayude a dibujar su volcán.

Cuento sobre los errores: Soy más fuerte que mis errores

Aceptar que nos equivocamos no siempre es fácil, y para los niños, aún menos. Muchas veces, cuando cometen un error, sienten culpa, vergüenza o miedo al juicio. Este cuento sobre los errores infantiles está pensado para ayudarles a comprender que equivocarse es parte natural del aprendizaje, y que no hay crecimiento sin ensayo y error.

En Soy más fuerte que mis errores, Liam rompe sin querer un dibujo importante de clase. El impacto emocional es inmediato: se siente mal, no sabe cómo decirlo, y piensa que ya no lo van a querer igual. A través del acompañamiento de su profesora y una conversación sincera, descubrirá que todos cometemos errores, y que lo importante no es evitar fallar, sino aprender a repararlo con honestidad y cariño.

Este cuento para trabajar la culpa en niños permite abrir el diálogo sobre el error, el perdón y la responsabilidad. Está especialmente indicado para niños perfeccionistas, inseguros o muy sensibles al juicio externo, que se bloquean fácilmente ante un fallo.

También es útil en contextos escolares, donde el miedo a equivocarse puede frenar la participación o generar ansiedad. La historia enseña que el error no es un enemigo, sino una oportunidad para crecer, aprender y acercarnos más a los demás cuando lo enfrentamos con sinceridad.

Soy más fuerte que mis errores es un cuento lleno de ternura y verdad, que acompaña sin juzgar y devuelve la confianza a los niños que han sentido que equivocarse los hace menos valiosos. Porque los errores no restan valor: nos hacen humanos.

Cuento sobre los berrinches: Soy más fuerte que mis berrinches

Las rabietas o berrinches infantiles son una de las expresiones emocionales más intensas y difíciles de gestionar en los primeros años. A menudo ocurren cuando los niños se sienten desbordados, frustrados o simplemente no saben cómo expresar lo que les pasa por dentro. Este cuento sobre los berrinches está creado para mirar esa emoción sin juicio y ofrecer un camino amoroso hacia la autorregulación.

En Soy más fuerte que mis berrinches, Liam quiere algo en un momento inadecuado y no acepta el “no”. Su cuerpo empieza a tensarse, los gritos salen sin pensar y las lágrimas inundan su rostro. Parece que nada lo puede calmar… hasta que un abrazo, una pausa y una respiración cambian el curso del momento. Sin sermones ni castigos, solo presencia y contención.

Este cuento está especialmente diseñado para niños entre 2 y 6 años que atraviesan con frecuencia situaciones de desborde emocional. Ayuda a los peques a identificar lo que sienten durante un berrinche, a comprender que no son malos por explotar y que siempre hay una manera de volver a la calma con ayuda.

Es también una herramienta para madres, padres y educadores que desean acompañar las rabietas con empatía, sin recurrir a gritos ni amenazas. El cuento incluye una escena simbólica donde Liam imagina su berrinche como una tormenta, y cómo esa tormenta va pasando cuando alguien lo acompaña sin huir.

Soy más fuerte que mis berrinches no pretende evitar que el niño se enfade, sino enseñarle que su emoción es válida, que tiene un lugar seguro para expresarla y que siempre hay una forma de volver al equilibrio con amor, conexión y calma.

Beneficios de leer cuentos emocionales en casa o en el aula

Los cuentos emocionales para niños son una herramienta poderosa para acompañar el desarrollo interior desde edades tempranas. Leer este tipo de historias en casa o en el aula permite a los niños identificar y expresar lo que sienten de manera natural y sin juicios.

Entre los beneficios principales destacan: el fortalecimiento del vínculo afectivo entre adulto y niño, el desarrollo de un lenguaje emocional accesible, la mejora de la empatía y la reducción de berrinches o explosiones emocionales gracias a una mejor comprensión de lo que ocurre por dentro.

Además, los cuentos crean un espacio de pausa, de conexión profunda, donde el niño puede verse reflejado y comprendido. En la escuela, permiten abrir conversaciones colectivas sobre emociones; en casa, se convierten en momentos íntimos que nutren la seguridad emocional.

Cómo usar esta colección para acompañar emociones infantiles

La colección “Mis superpoderes emocionales” está pensada para ser una aliada en el día a día, tanto en el hogar como en el entorno educativo. Puedes usar cada cuento como puerta de entrada a una emoción específica que tu hijo o alumno esté viviendo.

Recomendamos leer los cuentos en momentos de calma, cuando el niño está receptivo. También son útiles después de una situación emocional intensa (berrinche, tristeza, miedo) como forma de procesar lo vivido. Las historias ayudan al niño a sentirse comprendido y acompañado.

Cada cuento incluye un mensaje final del protagonista y una guía práctica para adultos. Estos recursos son ideales para reforzar los aprendizajes y generar conversaciones sencillas y profundas sobre lo que sienten los niños.

Libros disponibles en varios idiomas

Con el objetivo de llegar a más familias alrededor del mundo, la colección “Mis superpoderes emocionales” está disponible en seis idiomas: español, inglés, francés, alemán, italiano y holandés. Cada traducción ha sido cuidada para mantener la sensibilidad emocional y el tono cálido de los cuentos originales.

Esto permite que niños y niñas de distintas culturas puedan trabajar sus emociones en su lengua materna y que educadores bilingües o multiculturales puedan usar los libros como recursos en sus aulas.

Puedes elegir el idioma desde el menú principal del blog o encontrar la edición que necesitas directamente en Amazon. ¡Las emociones no tienen fronteras!

¿Quién es Lili Lion? Sobre la autora

Lili Lion es escritora, madre y apasionada por la infancia y el mundo emocional. Su misión es ofrecer herramientas accesibles, sensibles y realistas para acompañar las emociones de los niños desde el respeto, la empatía y el amor incondicional.

Cada cuento nace de la experiencia personal y del deseo profundo de transformar la forma en que adultos y niños se relacionan con lo que sienten. Lili cree firmemente que entender las emociones es el primer paso para sanar, crecer y conectar de verdad.

Además de esta colección, está trabajando en nuevos libros, recursos educativos y contenidos digitales que buscan sembrar luz en los corazones pequeños... y también en los grandes.

¿Qué emoción trabaja cada cuento?

Cada cuento de la colección “Mis superpoderes emocionales” está diseñado para trabajar una emoción concreta de forma clara, respetuosa y cercana a la experiencia real de los niños y niñas. Esta tabla te ayudará a encontrar rápidamente el libro que mejor acompaña la emoción que quieras explorar con tu peque.

Título Emoción trabajada
Soy más fuerte que la rabia Rabia e impulso
Soy más fuerte que el miedo Miedo a dormir solo
Soy más fuerte que la tristeza Tristeza y duelo emocional
Soy más fuerte que la vergüenza Vergüenza, error y autoestima
Soy más fuerte que los celos Celos y necesidad de atención
Soy más fuerte que mi frustración Frustración ante errores o límites
Soy más fuerte que mis nervios Nervios, ansiedad y miedo escénico
Soy más fuerte que el enfado Enfado por cambios o frustración
Soy más fuerte que mis errores Culpa, error y reparación
Soy más fuerte que mis berrinches Berrinches y desborde emocional

Estos cuentos no solo ayudan a trabajar emociones infantiles, sino que también fortalecen el vínculo afectivo, fomentan el lenguaje emocional y ofrecen herramientas reales para el día a día. Puedes leerlos en casa, en el aula o en consulta. Cada historia es una semilla de conexión emocional.

Preguntas frecuentes

Están recomendados para niños y niñas de entre 3 y 6 años, aunque muchos cuentos también conectan con peques de hasta 8 años. La clave no es solo la edad, sino cómo se sienta identificado el niño con la emoción trabajada.

Sí, son ideales para entornos educativos: escuelas infantiles, aulas de infantil y primaria baja. Cada cuento permite abrir conversaciones sobre emociones, respetar los ritmos de los niños y fomentar el lenguaje emocional desde lo cotidiano.

Lo mejor es leerlos en momentos de calma, sin prisas, y luego conversar sobre lo que ha sentido el niño. También pueden usarse después de un momento emocional difícil, para volver a conectar y entender lo vivido desde fuera.

Sí, los cuentos están inspirados en la crianza respetuosa, la educación emocional y la neuroeducación. No siguen una única corriente, pero están diseñados para validar la emoción, ofrecer herramientas y fortalecer el vínculo afectivo.

Algunos cuentos, como Soy más fuerte que el miedo o Soy más fuerte que la tristeza, son perfectos para leer antes de dormir, ya que acompañan emociones suaves y ofrecen calma. Otros, como Soy más fuerte que la rabia, funcionan mejor durante el día o en momentos de reflexión.

Todos los títulos están disponibles en tapa blanda en Amazon. Puedes acceder directamente desde esta página a cada cuento o buscar “Lili Lion” en Amazon.es para ver toda la colección.

Gracias por acompañarnos en este viaje emocional

Las emociones no se enseñan con definiciones, se descubren viviéndolas. Por eso, cada uno de estos cuentos emocionales nace del deseo profundo de ayudarte a acompañar el mundo interior de tu hijo o hija con presencia, palabras y mucho amor.

“Mis superpoderes emocionales” no es solo una colección de libros: es una invitación a mirar con ternura lo que sentimos, a dar permiso para expresar y a recordar que cada emoción, por difícil que parezca, puede transformarse en fuerza interior.

Si alguno de estos cuentos ha resonado contigo, si has sentido que puede ayudar a tu peque en su camino emocional, te invitamos a explorar cada título con calma y cariño. Puedes acceder a cada cuento desde esta página o visitar directamente la tienda de Amazon para ver la colección completa.

Porque cuando ayudamos a un niño a entender lo que siente, no solo lo estamos educando... lo estamos abrazando por dentro.

Con cariño,
Lili Lion